Páginas

viernes, 23 de agosto de 2013

VIVIR CON MENOS Y TENER MUCHO MAS

Ya hace más de seis meses que dejamos nuestro trabajo, nuestra casa, nuestros carros, nuestras comodidades y nos fuimos hacer lo que Dios nos envió. Vivimos un mes en República Dominicana, estuvimos dos meses en Puerto Rico poniendo algunas cositas en orden, mi esposo volvió a República Dominicana por dos semanas  y ya vamos para cuatro meses en North Carolina trabajando en las misiones.

Parecerá imposible lo que voy a contar, pero es lo que sucede cuando somos obedientes a la voz de Dios.

A pesar de vender todo lo que teníamos y dejarle  un 75% al necesitado, mi esposo dejó un excelente trabajo ( el mío no tan excelente pero un trabajo jajaja) y decidimos caminar con fe. NO nos ha faltado nada. Al contrario aunque parezca irreal tenemos mucho más ahora que cuando nos matábamos trabajando.

No solo hablo espiritualmente, ahí obviamente hemos crecido y nos sentimos los cuatro que nunca habíamos estado tan cerca en hacer la perfecta  voluntad de Dios como hasta ahora. Hablo también de lo físico.  Cuando Dios me envía a República Dominicana y luego a North Carolina me dio miedo el lugar que iba a ser nuestro hogar y la seguridad que íbamos a tener y Dios me contestó bien claro, Te pondré en lugar seguro. Algo que las personas me comentan cuando nos visitan es, Wao que seguro es este lugar, Se ve súper tranquilo y frases así. Obviamente mi Padre lo buscó por mi sabía donde llevaba a sus hijos.

 A pesar de mi casa ser mucho más pequeña que la que teníamos  antes, me encanta, es justamente lo que necesitábamos, mis hijas aman limpiar todo rápido, no aman tanto compartir habitaciónJ.  A pesar de no ganar en sueldo ni la mitad de lo que ganábamos antes, no nos ha faltado absolutamente nada. Dios nos continúa proveyendo cada día. Antes yo vivía con presupuesto y aunque no nos sobraba mucho ya sabía cómo iba a pagar nuestras deudas de cada mes. Acá dependemos de la oración, ayuno y  de la completa provisión de Jehová para pagar cada mes. Y de una manera milagrosa pagamos todo y nos sobra para guardar, algo que nunca pasaba cuando trabajamos los dos terrenalmente. Ahora trabajamos para el Reino de Dios y él nos paga mes tras mes. Cada mes es  por fe!

Para hacer nuestra “locura” de mudarnos de un lugar a  otro tuvimos que tomar un dinero prestado y “de la nada” nos llegó un dinero y pudimos saldar todo. Hasta detalles para compartir en familia y como matrimonio Dios nos ha regalado. Los otros días quería pasar un ratito con mi esposo y lo invité a comer (realmente no tenía mucho dinero lo iba a llevar a comernos un helado o algo así) y Una hora antes de salir de casa me llega “de la nada” una tarjeta de regalo de un restaurante. 

Me preocupaba  las amistades de mis niñas ya que tantos cambios y a la edad que tienen sus amistades son  algo importante  y “de la nada” han aparecido en cada lugar que vamos nuevas amistades.  A pesar que mis hijas dominan el inglés, necesitan perfeccionaro y  “de la nada” alguien se ofrece a enseñarles inglés y les dejó  sus libros. Mi esposo tenía que volver a R.D y no teníamos dinero para un gasto así y  “de la nada” los pasajes, estadía, comidas todo pago para su viaje a ayudar a personas con tantas necesidades.  En octubre tiene su primer viaje misionero a México y como ya sabrán “de la nada” ya está todo pago.

Si , estamos viviendo con menos dinero, menos espacio en el hogar y solo tenemos un carro, pero tenemos más tiempo juntos, más bendiciones y más tiempo para darnos cuenta y contar a otros que realmente estas cosas que nos pasan no son “de la nada” es un Dios real que nos llamó y nos está  respaldando en todo momento.

El no lo hace solo con nosotros, Dios lo hace con cada persona que le cree, le sirve y hace su perfecta voluntad. Si le sirves se que tendras historias como las mias, si no lo  haces te invito a que te des una oportunidad. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario