Anoche una de
mis hijas se despertó en la madrugada, enferma con fiebre y vómitos, no me enteré hasta que mi otra hija me despertó para avisarme. No me enteré
porque estaba dormida.
Por más que
quiero cuidar de mis hijas y estar siempre
para ellas hay momentos donde estaré lejos o dormida. Que poderoso saber que mi
Dios nunca duerme, que siempre está
disponible. (Salmos 121:3) No dará tu pie
al resbaladero, ni se dormirá el que
te guarda.
Dios siempre está dispuesto a escucharnos. Si
alguna vez te has sentido ignorado,sólo, que no te escuchan, o te has levantado
en medio de la noche enfermo sin tener a quien recurrir porque todos están dormidos,
no te desesperes hay uno que siempre está para ti.
1 Pedro 3:12.
Porque
los ojos del Señor están sobre los justos, Y sus oídos atentos a sus oraciones; pero el rostro del Señor está contra
aquellos que hacen el mal.
No importa
cuán lejos estés de tus familiares, de tu casa o del lugar donde te puedas
sentir seguro. Si clamas a Dios él te escuchará. Él siempre está dispuesto para
sus hijos.
No estás solo. Te aseguro que él te escucha, el siempre irá a tu lado. Procura que él sea tu
ayuda en todo momento, que cuando pases por alguna situación antes de correr a
un amigo acudas primero al que te ama como nadie.
Amo este versículo!!
Salmos 32:8 (TLA)
Tú me dijiste: «Yo te voy a instruir; te voy a enseñar cómo debes portarte. Voy a darte
buenos consejos y a cuidar siempre de ti.
Que nos puede
faltar? Si el gran Yo Soy me instruye, me enseña, me da consejos y vela por mí!
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